Están tan lejos los
muros
cuando cuento
conmigo.
Están solitarios murmurando
sus insignificancias,
son de textura y
color aburrido.
Se asemejan al humo
de mi cigarrillo.
Son tan volátiles y breves…
cuando me armonizo.
No necesito irme
buscando paisajes que me calmen.
Ni bellezas naturales-
Ni cielos abiertos-
Ni aromas nuevos-
Sólo …
Sólo me necesito
ahí/aquí conmigo,
para encontrar el
verdadero sentido… el Único camino.
Hoy es el día de la felicidad...¿y los demás días son todos tristezas?...y sin embargo la felicidad existe porque yo soy feliz, no hay más. Me encanta ese tema que has puesto, lo apunto. No olvides a la gente que no te olvida para bién...Me gusta tu blogs.
ResponderEliminarNo vemos por aquí.
Contar con uno mismo, es cierto, hace que los muros se alejen aunque sea un poco.
ResponderEliminarLo recordaré cuando esté delante de mis propios muros, esos que hacen que se acabe el camino si no se saltan.
Me alegra leerte, querida Laura,
Un beso
Siempre hay volutas con forma de arco-iris en tu corazón.
ResponderEliminarBeso.